En Guatemala, pocas tradiciones evocan tanta identidad, memoria y espiritualidad como los nacimientos. Cada figura, cada escena y cada gesto recreado en ellos cuenta una historia que ha viajado por generaciones, uniendo familias, comunidades y territorios. Y, como cada año, Banco Industrial se enorgullece de acompañar esta tradición, respaldando una de las exposiciones culturales más significativas de la epoca de Navidad en el país: El Nacimiento.

Este 2025 marca un acontecimiento histórico y espiritual: el 400 aniversario del natalicio del Santo Hermano Pedro, uno de los personajes más queridos y emblemáticos de la identidad guatemalteca. Su vida de servicio, compasión y cercanía con el prójimo no solo transformó a la Antigua Guatemala del siglo XVII, sino que sembró un legado que permanece vivo en la devoción popular y en la obra social que inspiró en todo el continente.

En el marco de esta conmemoración, la quinta edición de El Nacimiento se dedica a presentar escenas que recorren episodios centrales de la vida del Santo, relacionándolos con la tradición del nacimiento de Jesús. Esta perspectiva ofrece a los visitantes una lectura nueva y emotiva: cómo dos historias —la del pesebre de Belén y la del humilde fraile canario que se convirtió en santo— se entrelazan a través de la luz, la esperanza y la entrega.

Una plaza antigueña en el corazón del Centro Financiero del Banco Industrial

Como antesala a la exposición de noviembre, Banco Industrial abrió las puertas del lobby de su Centro Financiero en zona 4 para presentar una instalación especial que captura el espíritu de esta edición. El espacio se transformó en una plaza antigueña, con la imponente fachada de la Iglesia del Beaterio de Belén, un escenario profundamente significativo al ser el lugar fundado por el propio Hermano Pedro y centro del carisma betlemita.

Esta intervención artística, elaborada con precisión técnica y sensibilidad histórica, recrea una serie de escenas que representan elementos esenciales de la tradición y del legado del Santo:

La posada guiada por la luz del Hermano Pedro

Al centro de la plaza avanza una posada tradicional, donde los peregrinos portan faroles guatemaltecos que iluminan el camino. Esta procesión es encabezada por una figura del Santo Hermano Pedro con su campana, un símbolo profundamente vinculado a su misión de llamada, auxilio y esperanza para quienes más lo necesitaban.

La vida cotidiana: mercados de Navidad y pólvora

Se representa una instalación que incorpora dos mercados:

• un mercado navideño, donde artesanos y familias recrean la calidez de las plazas antigüeñas en temporada de fiestas, y
• un mercado de pólvora, que evoca las tradiciones populares que acompañan las celebraciones de diciembre y enero.

Ambos espacios reflejan la vida comunitaria, la convivencia y la alegría que caracterizan nuestras tradiciones.

Los gigantes

Frente al templo se presentan dos gigantes danzantes, personajes festivos propios de la cultura popular guatemalteca. Su presencia simboliza la unión entre la solemnidad religiosa y la celebración comunitaria, recordándonos que la tradición se vive con el corazón, con fiesta y con gratitud.

El Nacimiento frente a la iglesia

Como eje central, un Nacimiento se coloca a las puertas de la iglesia. Esta escena, reinterpretada cada año por El Nacimiento, reafirma la devoción guatemalteca por la representación del nacimiento de Jesús, integrando arte, espiritualidad y memoria colectiva.

El valor de la tradición: una herencia que Banco Industrial acompaña

La instalación no solo es una expresión artística; es un punto de encuentro entre el presente y la memoria. Cada figura y cada escena fueron seleccionadas cuidadosamente para narrar el legado del Hermano Pedro:

• su cercanía con la gente sencilla,
• su servicio incansable,
• su capacidad de reunir comunidades,
• y su luz, que continúa guiando a Guatemala cuatro siglos después.

Este esfuerzo artístico reafirma el compromiso del Banco Industrial con la preservación de la identidad cultural, el fomento del arte guatemalteco y el apoyo a iniciativas que conectan a las familias con sus raíces.

A través de El Nacimiento 2025, la institución no solo acompaña una tradición, sino que se convierte en puente entre generaciones, impulsando espacios donde la historia se celebra, la fe se renueva y el país avanza con la fuerza de sus símbolos más queridos.

Para este 2025 El Nacimiento se presenta en la Iglesia de Belen en La Antigua Guatemala, estara abierto desde el 5 de diciembre al 11 de enero, los horarios son de martes a domingo de 9:00am a 8:30pm.

Complementa la exposicion una hermosa agenda cultural con conciertos todos los sabados con diversos tipos de musica y conferencias culturales en formato digital.