Una tarjeta es una herramienta financiera tan poderosa como el dinero mismo.
Y en este tema no hay mejores ni peores, simplemente todo va en relación con lo que conviene a cada usuario dependiendo de sus hábitos y usos.

Al buscar cómo evaluar tarjetas de crédito son varios los aspectos que tienes que considerar:

Revisa tus posibilidades

Antes de obtener una tarjeta revisa cuál es a la que tienes acceso. Mientras mejores sean tus calificaciones crediticias, mejores condiciones obtendrás.

En caso de que tus números no sean suficientes, acude con tu institución financiera para que te dé más detalles sobre tu caso y poder resolverlos de ser el caso.

Identifica tus necesidades

Debes identificar el tipo de tarjeta que necesitas y en general son tres: las que dan recompensas, las que te ahorran en intereses y las que te respaldan en otro crédito.

Como ya lo dijimos, la mejor es la que cubre tus demandas específicas. ¿Para qué necesitarías una tarjeta que regala millas de vuelo, si tú no viajas?

Haz las preguntas adecuadas

Para dar con el producto a nuestra medida hay que hacer las preguntas adecuadas.

Si filtramos la búsqueda de acuerdo a nuestra puntuación y al gasto mensual, avanzaremos hacia la mejor opción.

Costos: Costos de apertura, anualidad, programas de reembolso, comisiones y sanciones, así como seguros, depósito y garantía deben estar muy claros.

Escalabilidad: Escoge una tarjeta que te dé competitividad en todos los sentidos y que crezca a tu ritmo.

Políticas: Revisa las políticas para trasferir saldos, para reajustar los planes de pago y para contratar deuda.

Recompensas: Las recompensas deben ir de acuerdo a lo que buscas. No es lo mismo un reembolso de tasa de interés, que el pago de la anualidad o boletos de espectáculos.

En resumen, busca una tarjeta con las recompensas más altas y aprovechables por ti, que tengan que ver con tu estilo. El costo de la anualidad suele absorberse con el uso a través de los programas de beneficios del banco.

Si es parte de tus hábitos viajar al extranjero, busca la que tenga más medidas de seguridad tales como chip, PIN y candados virtuales.

Pero por sobre todas las cosas, dale un buen uso para que realmente sea una herramienta y no un obstáculo para tu crecimiento.

¿Ya solicitaste tu tarjeta de crédito empresarial?